Hoy leyendo una columna de Santiago Iñiguez, presidente del IE, inspirada por su mención de 2 autores del siglo 17, Leibniz y Voltaire, no pude más que pensar en lo que vivimos los colombianos, con el descontento general del presidente de Colombia, a quien no se lo puede llamar Líder, y que sólo decir el nombre de presidente, da pena ajena y dolor ya que no merece esa denominación, porque no está ejerciendo esa labor de guía para conducir a otros, todo un país de 45M de habitantes, sino somos más.

Existe un desanimo general en el país, a todo nível, aún en los estudiantes de las universidades públicas quiene lo eligieron como presidente y hoy como el 70% de la población se arrepiente. Eso si, ha unido a los colombianos, y esperaría que es tan malo lo que se siente, que nos convoca a todos a unirnos en paz para salvar el país.

Leibniz, defiende la existencia de Dios, la inmortalidad del alma, la sabiduría y el poder de Dios. Yo lo interpreto como la aceptación de la existencia de un ser superior, ese soporte que mantiene cuando suceden las crisis o cuando brillan luces. Esta base espiritual se hace tan necesaria en este momento para no perder el optimismo, la esperanza de seguir avanzando y dando lo mejor de nosotros mismos. A propósito el presidente ni siquiera menciona al micro empresario, grupo del cual soy parte, en su discurso solo maltrata y polariza … dolor de país.

Voltaire, deista, más realista, defiende la existencia de Dios por vía racional, en oposición a doctrinas más místicas como la de Leibniz. Su aporte para mí en este momento es su defensa a la tolerancia, virtud que necesitamos ahora y a la libertad de expresión la cual necesita el tan mal llamado presidente de Colombia.

Es valioso, para mi pensar en estos temas en este momento y hacer un llamado o una invitación a refugiarnos en nuestras creencias y valores, en nuestra inteligencia espiritual. No podemos perder el optimismo, ni mucho menos la esperanza. Necesitamos esas virtudes para seguir adelante y sentir nuestra esencia de colombianos, y de seguir haciendo un frente unido para no sucumbir frente a este entorno que ha creado un mal gobierno, el gobierno del señor Petro.

Con cariño

María Reina