La felicidad se refiere a vivir con un propósito, no es ser más rico, o ser más famoso, la felicidad es un estado permanente que viene de adentro, del espíritu, de esa conexión con el Universo, de hacer lo que nos gusta y servir a los demás.

La felicidad la acompaña como dice WALDIGNER, la calidad de las relaciones con las personas más cercanas  (uno o varias). La amistad y el cariño nos acompañan y nos dan ese alimento que necesita el corazón y el cuerpo.

Con el espíritu  y el corazón, trabajamos el cuerpo con el ejercicio  y el alimento sano por una parte, y la mente con el conocimiento  y trabajo/ servicio por la otra, así tenemos el equilibrio  que se requiere para ser feliz.