“La sociedad puede dibujar un círculo que me deja afuera, pero mis pensamientos superiores me permitirán entrar”.


El Credo de Marva Collins

“Welcome to the sucess” Bienvenido al éxito , son las palabras con las que recibía Marva Collins a sus estudiantes de  la escuela de Chicago, Westside Preparatory School ,  quienes llegaban a este establecimiento luego de haber sido rechazados de varios colegios públicos y ser considerados en algunos casos como retrasados.

Marva Collins, dejó una huella en el sistema educativo de Estados Unidos y del mundo por su forma de enseñar potencializando el talento, generando responsabilidad y auto confianza de todos aquellos niños que pasaron por su escuela. “Creo en ustedes y ustedes serán buenos en lo que realicen” pueden volar, “alcanzar el cielo o lo que se propongan si trabajan para ello”. “Ustedes son protagonistas de su éxito y “nadie puede impedir que su camino se trunque, si ustedes no lo permiten”.

Esta Mujer, quien murió el año pasado, hizo que  más de 1000 niños salieran exitosos, felices y con un perfil de hombres de bien, orgullosos de su país y condición, a estudiar en las mejores universidades de los Estados Unidos. Fue llamada por el Presidente Reagan  y luego por el Presidente Bush (Padre) a ser secretaria de educación del Gobierno, sin que ella aceptase este cargo por no descuidar y seguir en su camino de enseñanza.

Ella logró con su dedicación y amor devolver la esperanza de sus hijos a sus padres, demostrando que el amor, el estímulo y la confianza puede más que el regaño, la crítica o la calificación baja.

Su método de estudio era rígido, había que aprender una poesía semanal, leer y escribir diariamente, hacer una investigación con disertación mensual y evocaba al pensamiento crítico socrático. Era rígida en el horario y en la pulcritud de sus estudiantes. Sin embargo jamás permitía que alguno de sus alumnos caminara atrás o tuviera desaliento por la situación económica, condiciones de vida o por la dificultad en el aprendizaje. Con sus palabras motivadoras y cariño lograba el máximo de cada niño y potencializar el talento que todos los seres humanos tenemos.

Esta escuela fundada en 1975, no tuvo ingresos, ni condiciones físicas agradables hasta 1980 cuando un periodista la encontró y publicó su experiencia asistiendo a una de sus clases. Desde ese momento empezó a recibir soporte económico.

Hoy en la Florida, el maestro ULMER sigue sus pasos, Chris Ulmer dedica los primeros 10 minutos de cada día de clase a resaltar las cualidades positivas que cada uno de los estudiantes posee. “Si le dices a un niño que es maravilloso, simplemente lo será, y si le dices que es un inútil, probablemente no pueda cumplir los objetivos que se propone”.

Desconozco si existen otras escuelas en el país o en el mundo  donde se eduque de esta manera. Sin embargo la reflexión para todos y en especial para el sistema educativo colombiano es entender que la motivación y la concepción de auto confianza y responsabilidad en los jóvenes, son mas importantes en la potencialización del talento, en la generación de ciudadanos de bien, como el agua nutre a esa semillas de nuestro futuro país, el de nuestros hijos.

María Reina
MR Consultores